Las dudas de ella.

Acontecia nuevamente Sabado, gris, oscuro, tormenta tediosa , milanesca sombra robando toda vitalidad de aquellas ganas.


Como pronuncie las palabras, como no recibi ni un SI ni un NO, de pronto el silencio quedo obsoleto, me habia quedado agazapado en el reflejo de aquella gota de aquel 7 de Septiembre, intentado escuchar los gritos desde aquel 4º B, me revolvia como un pajaro antes de morir con las alas quebradas, queria volar pero ya habia consumido mi ultimo aleteo añorando lo que no podia desdichar, maldita sea me dije, que más habra  de ser?.


Aquella melena rubia me habia cautivado de sobremanera, concavos mis desatinos, obtusos mis inquietudes, la longitud de onda de palpito me estaba quebrando hacia la locura..