Pompeya en silencio.

Perfectamente imperfecto...


De pronto despolvoreó la adrenalina,
solo queda el recuerdo de cómo se sentía,
la marca se despinta antes de llegar,
en el viaje de ensoñaciones pervertidas.

La misma debilidad
las voces compradas con miradas
con el as de los infiernos.
y la adicción a la bondad

Es un día cualquiera,
con el miedo colgado de sus ojos
empático igual.. hacia las caricaturas de lo obtuso,
la curva empieza a tener subidas y bajadas

ya no pasa por la misma calle,
ahora cancela los viajes
y traiciona su propia conciencia
solo por regalarse unos cuantos placeres

En las huellas que las manecillas olvidaron
hablan un par de arrugas,
se escucha la misma voz,
el tiempo sale caro,
la inversión se pierde cuando se trata de dos.

Donde todos desaparecen cuando se trata de dar
donde se pierde en el camino con los años
y solo se asoma a quien nunca se atrevió a mirar…